- La infraestructura, recuperada por la Alcaldía de Medellín para ser utilizada en caso de llegar a la alerta naranja, finalmente atenderá pacientes no Covid-19.
- En total fueron invertidos $13 mil millones de pesos, se generaron 177 empleos
- El Hospital General de Medellín será el operador de la Clínica de la 80.
El alcalde de Medellín, Daniel Quintero Calle, lideró la apertura de la recuperada Clínica de la 80 que desde el pasado 27 de marzo la Administración Municipal tomó en comodato y de forma gratuita tras llegar a un acuerdo con Saludcoop, entidad en liquidación. Desde aquel momento, funcionarios de la Alcaldía comenzaron las labores de recuperación, adecuación y equipamiento de la infraestructura de tercer nivel.
La clínica, redefinida para la atención de pacientes no Covid-19, empezó a ser intervenida de forma integral e inmediata el 28 de marzo por un equipo interdisciplinario de la Alcaldía de Medellín a través de las secretarías de Salud e Infraestructura Física, al igual que otras instituciones como la Empresa de Desarrollo Urbano (EDU), Metrosalud, Dagrd, la Escuela de Bioingeniería del Instituto Tecnológico Metropolitano (ITM), Emvarias, EPM, Metroparques, entre otras.
Como parte de la intervención de 22 mil metros cuadrados de infraestructura y 6.700 metros cuadrados de fachada, el 14 de abril la nueva infraestructura recibió dos plantas eléctricas para garantizar la energía necesaria para el funcionamiento de los equipos vitales de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) y que serán soporte ante posibles eventualidades.
Como parte de la intervención en la edificación y sus áreas, el 23 de abril llegaron los nuevos equipos conocidos como “chiller” para recuperar el sistema de aire acondicionado, un tanque de oxígeno, la bomba de vacío y dos bombas de aire medicinal que son fundamentales para el tratamiento de pacientes diagnosticados con Covid-19 y el correcto funcionamiento de varios de los equipos biomédicos.
Las labores del personal se centraron en tres pisos. En el sótano se ubicaron las plantas de emergencia, el sistema de bombeo de agua potable, la red contra incendios, el aire medicinal y los equipos de potencia para que funcionaran las plantas de los dos pisos restantes, el piso 5 y el 6.
También se adecuó la terraza para instalar los “chiller”; se repararon cuatro ascensores, dos para camilleros y dos para el personal; y se repararon las Unidades Manejadora de Aire (UMA) para el funcionamiento del aire acondicionado.
En el piso 5 se trabajó en varias salas que se adecuaron, la sala de hospitalización, la sala de cirugía y esterilización y la sala de Cuidados Intensivos y Especiales. Finalmente, en el piso 6 se adecuaron dos salas con 40 camas de hospitalización.
En total, fueron invertidos $13 mil millones de pesos, se generaron 177 empleos y la clínica comenzará a operar en un principio con 90 camas instaladas con la posibilidad de ampliar hasta más de 300 como parte del Plan Mil con el que busca dotar la ciudad de mil Unidades de Cuidados Intensivos para enfrentar el coronavirus.